Esta es la receta prometida en el post que hablé, sobre el Monasterio de Guadalupe, se llama Prueba y es carne de cerdo guisada y previamente puesta en adobo durante una noche, para que tome bien los sabores con los que se condimenta. Naturalmente estos sabores los aporta un ingrediente muy conocido por todos aficionados a la cocina “el Pimenton de la Vera” .
Como es sabido Extremadura es famosa por su cabaña porcina y como no por sus productos derivados del cerdo y la matanza, de una calidad extrema como los jamones o el salchichón ibérico de Montanchez secados al aire puro de la sierra, productos que hemos probado, así como este plato que tiene su origen en el día en que se sacrificaba el cerdo y ya se probaba al día siguiente su carne, para comprobar su calidad, aliñada con vino, tomate, pimentón y otras hierbas aromáticas.
Espero que os guste, yo le añado unas patatas para que el plato sea más completo.
Para animaros a conocer Extremadura, os dejo una hermosa vista de el Puente de Alcántara.

Ingredientes:
- 400 gr de magro de cerdo
- 1 cucharada de postre de pimentón de la Vera dulce
- 1/2 cucharada de postre de pimentón de la Vera picante
- 1/2 cucharada de orégano
- sal,
- 1 hoja de laurel
- 1 cebolla
- 2 dientes de ajo
- 1 pimiento verde
- 125 ml. de vino blanco (Rueda, Ribera del Duero)
- 1 tomate grande maduro
- caldo de verduras y agua
- aceite de oliva virgen extra
- Patatas de freír
Elaboración:
- Comprar la carne cortada en dados, y mezclarla en un bol con el orégano, la sal, las dos clases de pimentón y el vino.
- Dejar macerar toda la noche.
- Al día siguiente, picamos la cebolla, el ajo y el pimiento verde en Brunoise y lo ponemos en una cazuela o sopera con aceite de oliva V.E. hasta que este pochado
- Añadimos los cuadraditos de carne y cuando estén dorados añadimos el tomate rallado sin piel ni pepitas, rehogamos y añadimos el caldo y el agua, la hoja de laurel y dejamos cocinar hasta comprobar que la carne ya está tierna
Servimos en cazuela pequeña con su salsa como aperitivo, o bien acompañado de unas patatas bravas para quien guste del picante, con una cerveza muy fría y seguro que os sorprende el sabor de este guiso.
Que lo disfrutéis.